Cerca de la frontera con Brasil se encuentra el balneario Barra del Chuy, un centro turístico elegido por un importante número de visitantes locales y regionales. Desde la Barra del Chuy se puede vislumbrar el Océano Atlántico junto al Arroyo Chuy, un espectáculo único especialmente para las personas afines a la fotografía ya que un gran número de gaviotas se posan allí. La tranquilidad de la playa combinada con una animada vida nocturna hacen de este balneario un clásico disfrutable para todos los miembros de la familia.
Qué ver y qué hacer en Barra del Chuy
La playa es la mayor atracción del balneario, con sus aguas océanicas abiertas y sus olas perfectas. Gracias a los vientos constantes, el balneario es ideal para practicar kitesurf y surf. La orilla del mar tiene millares de almejas y piedras que tornan más lindo el paisaje y entretienen a los más chicos. Hay buenas dunas para sandboard.
Los amantes de la pesca también tienen su premio, con un excelente punto pesquero en el puente de la Barra sobre el Arroyo Chuy, que une los lados uruguayo y brasileño de la playa. Todo el recorrido del arroyo es un paraíso para el ecoturismo y el avistamiento de aves. Una excursión clásica es cruzar el puente para visitar la “Barra Brasilera” (como se conoce al balneario Barra do Chuí), donde está el icónico Faro Stella Maris. Hay que subir sus treinta metros para contemplar la increíble vista oceánica desde allí.
Otro paseo obligatorio es el Fortín de San Miguel, a solo 6 kilómetros de la ciudad de Chuy. Es una histórica fortaleza datada de 1734, construida sobre el panorámico Cerro San Miguel. Además de su imponente arquitectura (muy bien conservada desde sus orígenes), son muy atractivos los salones interiores, donde se exponen piezas militares y objetos valiosos de la época colonial.
Y si hablamos de fortificaciones históricas, no se puede dejar de visitar la Fortaleza de Santa Teresa, elevada en 1762. Está sobre la ruta 9, a 36 kilómetros del Chuy. El Parque de Santa Teresa es un santuario natural que deslumbra a los ecoturistas.
La gran mayoría de los veraneantes en la Barra del Chuy aprovechan para visitar la ciudad fronteriza de Chuy (a solo 9 kilómetros), famosa por los bajísimos precios de sus free shops, tiendas y ferias. La Estrada da Barra une la playa con la ciudad, y hay varios servicios de transporte entre ambas.
La ciudad del Chuy complementa al balneario con sus servicios y locales gastronómicos, aunque en la Barra misma hay un buen número de bares y restaurantes para salir. Los jóvenes encuentran la diversión en las diferentes discotecas, que toman su tono más festivo durante el carnaval.